Villalpando

Villalpando es un típico pueblo castellano, con una población de 1700 habitantes. Conserva un importante patrimonio como la iglesia de los Templarios, el Palacio de los Condestables de Castilla, donde éstos vivieron durante el siglo XVI, la Iglesia de Santa María la Antigua, de estilo románico mudéjar, y la emblemática puerta de Villa, éstas dos últimas declaradas Bien de Interés Cultural.

Además, Villalpando presume de ser el primer pueblo de la cristiandad que declaró la Inmaculada Concepción de la Virgen, un hito que sigue celebrándose el 8 de diciembre y que supone una de las principales fiestas locales, junto a la Feria de la Madera, en junio, y a la festividad de San Roque, máxima expresión de la afición taurina de los villalpandinos. En su amplia y animada plaza mayor y alrededores hay numerosos bares y cafeterías. También cuenta con piscinas e instalaciones deportivas municipales, abiertas al público.